lunes, 9 de marzo de 2009

de nuevo la hipocresía y el doble rasero. condenan el delito y acto seguido justifican y hasta alientan a los delincuentes. el asalto y el maltrato.

Fiel a su estilo, el gobierno dejó que una turba tire la piedra invadiendo la casa de Víctor Hugo Cárdenas y luego salió a esconder la mano que con seguridad estuvo detrás del acto violento y escandaloso.
La acción violenta llevó a que la turba invada la casa del ex vicepresidente y ahora pretenda confiscarla, sólo porque este hizo campaña por el NO en el pasado referéndum por constitución, buscando hacer escarnio público de oponerse al gobierno. Ahora tenemos la prueba palpable de que la justicia comunitaria ha sido constitucionalizada para que las comunidades indígenas dominadas por caudillos masistas y quien sabe pagadas incluso por operadores del gobierno, tomen la justicia por mano propia, situación muy propicia para ejercer actos irregulares y delincuenciales con la pretensión de ejercer control social y de hostigar y castigar a quienes no participan del mandato que impele a obedecer a un gobierno que exige subordinación total.
Personeros del gobierno hoy dejaron claras evidencias de que esta será la manera en que operarán en adelante, dejando que las turbas hagan de las suyas, mientras ellos que están por supuesto alentando y permitiendo estas acciones, saldrán luego a hacer declaraciones como las que escuchamos ayer de parte de funcionarios como los viceministros Chávez y Farfán, quienes al tiempo de lavarse las manos, planteando por supuesto que no habían tenido nada que ver en el asunto, no perdieron la oportunidad para dejar deslizar bajo cuerdas que la acción obedecía a que los campesinos "guardaban rencor" con Víctor Hugo Cárdenas porque este había formado parte del gobierno neoliberal de Gonzalo Sánchez de Lozada y porque no había hecho nada por ellos y porque finalmente había hecho campaña por el No.
Los viceministros voceros del gobierno plantearon además que el hecho era una reacción que respondía a las acciones políticas de Víctor Hugo Cárdenas señalando que estas son de entera responsabilidad del afectado. En resumen se lavaron las manos y dejaron a la víctima librada a la fuerza de la masa envenenada de revancha, de odio, de irracionalidad bestial.
El Viceministro de Justicia Wilfredo Chávez abordó una sarta de justificaciones apelando a que el hecho debería comprenderse en la relación favorable o desfavorable que Cárdenas habría desarrollado con su comunidad, como si esta fuera una razón que justifique la toma de la vivienda y que se violen los derechos individuales.
En el colmo del cinismo los viceministros Chávez y Farfán, haciendo uso de un discurso engañoso, se lavaron las manos mientras metían calda, mientras justificaban las acciones violentas y trataban de poner el dedo en la llaga de los opositores mostrándoles lo que les pasará si se oponen y que ellos no tendrán que hacerlo porque para eso tienen a los indígenas comunarios para lo que les han puesto la justicia comunitaria.
En otro de los registros de comunicación esquizofrénica de los que suele hacer uso el gobierno para decir y no decir y sobre todo para decir como si no dijera pero imponiendo el mensaje como un mandato, los viceministros señalados, plantearon que ellos no tienen nada que hacer, que nada está en sus manos porque en realidad esto "le corresponde a la justicia" y debe ser investigada por el Ministerio Público. Algo absolutamente falso, primero porque el gobierno hace lo que le da la gana independientemente de los fallos de la justicia y esto lo ha probado en muchas ocasiones, dejando de lado y desoyendo los fallos del poder judicial, como lo hizo en el caso del prefecto Leopoldo fernández, y en segundo lugar porque ahora la justicia comunitaria tiene poderes para que la turba actúe, y para que el gobierno actúe a través de la turba.
Los comunarios han pedido que el caso del vicepresidente Víctor Hugo Cárdenas quede en manos de la justicia comunitaria y no de la ordinaria, y la turba no ha sido desalojada de la casa, permanece haciendo guardia y vigilia y ha planteado que esta será revertida a la comunidad.
El dirigente Cruz Alarcón, quien ha sido señalado como uno de los promotores de la violencia, aseguró que la toma de la vivienda fue decidida en un ampliado y aseguró que se mantendrá y se impondrán las decisiones de la comunidad incluso por encima de la Policía y las leyes vigentes, aduciendo que estas están respaldadas por los usos y costumbres de su comunidad.
Sólo para tener una referencia de cómo piensan los comunarios transcribimos las expresiones que tuvo Alarcón sobre los abusos que se han generado: "Todos tenemos derecho a todo (...) la toma se ha hecho democráticamente por la dignidad", fue una de sus afirmaciones, mientras acusaba al ex vicepresidente de haber "vulnerado las normas internas de la comunidad" a la que pertenece como aymara.
"Si en caso, la insistencia de la Policía (y) algunas cosas más del Víctor Hugo; entonces la decisión se va alterar más (...) puede llevar a una convulsión esto, un movimiento. (...) Rogarles que pacíficamente (acepten la toma). Pero, devolver la casa va ser muy difícil, puntualizó el caudillo indígena que se siente que tiene la sartén por el mango. Los "hermanos" han actuado. De hoy bolivia escrito por centa reck.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Victor Hugo es un ciudadano connotado, victima ahora de las hordas del MAS, apoyadas por el gobierno de Evo Morales. Como en viejas y tristes épocas, cuando el dictador Luis García Meza, habrá que caminar “con el testamento bajo el brazo”, pero el camino de la libertad y la democracia se abre paso, “no hay mal que dure cien años, ni pueblo que lo resista”.

Desagravio a VHC: http://aulalibrebol.blogspot.com/2009/03/victor-hugo-cardenas-conde.html