La Casa Blanca anunció esta mañana que Cecilia Muñoz, hasta ahora Directora de Asuntos Intergubernamentales en la Administración de Obama, pasará a dirigir el Consejo de Política Nacional. La noticia ha sido recibida positivamente entre la comunidad latina de Estados Unidos ya que Muñoz, descendiente de padres bolivianos, se convierte en la hispana de mayor rango en el Gobierno.
“Durante los últimos tres años, Cecilia ha sido una asesora de confianza que ha demostrado tener sólidos criterios día tras día”, declaró Obama en un comunicado. “Ha hecho una labor extraordinaria en su función en nombre de las familias de la clase media, y estoy seguro de que igualmente se dedicará de manera inquebrantable a su nueva posición”.
La asesora de Obama, encargada de coordinar las relaciones entre la Casa Blanca y las autoridades estatales en materia de educación, sanidad o inmigración, ha destacado especialmente en estos últimos meses, cuando el presidente optó por modificar algunas de las normativas sin negociar antes con el Congreso. Muñoz es una firme defensora de medidas como la revisión de las órdenes de deportación de indocumentados sin antecedentes penales o los nuevos planes de reunificación familiar, anunciados la semana pasada.
El presidente ha destacado en su anuncio que Muñoz “lidera los esfuerzos de la Administración para reparar el fracasado sistema migratorio, de manera que éste satisfaga las necesidades económicas y de seguridad del siglo XXI”. La nueva directora de Política Nacional se convirtió en el centro de las protestas que este verano criticaron la política de deportaciones de la Casa Blanca. La denuncia de dos ciudadanos estadounidenses atrapados en el entramado legal de la agencia de inmigración, así como las cifras récord de expulsiones -un millón en tres años-, provocó una respuesta oficial, firmada por Muñoz, que estuvo a punto de enfriar aún más las relaciones con la comunidad latina. Su ascenso la convierte ahora, sin embargo, en la mayor aliada que pueden tener los hispanos dentro del Gobierno.
Angela Kelley, vicepresidenta de políticas de inmigración del Centro de Progreso Americano, define a Muñoz como una líder hispana que siempre ha estado en el centro de los debates sobre el acceso a la educación, la inmigración o la sanidad. “Este anuncio abre las puertas a miles de jóvenes latinas de todo el país. Podrán ver a una hispana trabajando codo con codo con el presidente y otros líderes políticos. Como en el caso de la juez del Tribunal Supremo Sonia Sotomayor o la Secretaria de Gabinete Hilda Solis, el nombramiento de Cecilia le dice a las hispanas de este país que ‘sí, se puede”.
Otras organizaciones, como el Foro Nacional de Inmigración, han aprovechado la fecha de hoy para presionar aún más a Obama, advirtiéndole que carece ya de excusas para no adoptar de manera más agresiva una política de inmigración centrada en la seguridad nacional y no en ataques a las familias inmigrantes.
Muñoz se incorporó al Gabinete de Obama en 2009, dejando atrás la vicepresidencia de la oficina legal del Consejo Nacional de La Raza (NCLR, por sus siglas en inglés), la mayor organización en defensa de los derechos civiles de los hispanos en Estados Unidos. Allí supervisó cuestiones como las leyes de inmigración, el acceso a la sanidad, la educación o la vivienda durante dos décadas, lo que avaló su candidatura a formar parte del equipo presidencial.
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